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Volvo Classic

La expansión global que vivía
Volvo, después de acabada la
Segunda Guerra Mundial, trajo consigo nuevos retos… entre ellos el de convencer al comprador extranjero de las ventajas de adquirir un Volvo, un coche fabricado en la ciudad de un país lejano de la que pocos (de la ciudad) habían oído hablar antes. En este caso, peculiar fue el caso de los
Estados Unidos, donde vender un coche de fabricación foránea era como tratar de venderle una nevera a los esquimales. Sin embargo, Volvo no tardó en demostrar que, incluso allí, había demanda para vehículos como su
PV 444.